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Maricarmen Chinchay.

Gustavo Dávila Angulo tiene 20 años usando lunas polarizadas. Actualmente, maneja una camioneta 4x4 de su propiedad. Como conductor, sabe que aproximadamente en dos semanas una ley podría quitarle el permiso para continuar utilizando este tipo de lunas en su vehículo y eso le incomoda.

Pero como especialista en Criminología, Gustavo admite que la medida es comprensible: "Es arbitraria pero las circunstancias obligan a que existan medidas de este tipo, como el tener cámaras de videovigilancia por todas partes. No nos gusta, pero es así. La situación de inseguridad que vivimos nos ha empujado a todos a esto".

Contar con protección es la principal razón por la cual Gustavo decidió usar este tipo de vidrios en su vehículo; sin embargo, la realidad indica que las lunas polarizadas estarían siendo un arma de doble filo en nuestra sociedad.

El 80% o 90% de los vehículos que se utilizan para cometer actos delictivos llevan lunas oscurecidas. Esto fue informado por el ministro del Interior, Daniel Urresti, quien anunció que presentará un proyecto de ley para eliminar los permisos para el uso de lunas polarizadas en autos particulares. La iniciativa legislativa no afectará a los vehículos oficiales del Estado.

Según Urresti, en dos semanas la ley estará lista y podrá ser publicada en el diario oficial El Peruano.

"La idea que mucha gente tiene de utilizar lunas oscurecidas para no ser víctima de asaltos y que no se vea quién va dentro del vehículo no funciona. Sucede lo contrario: si tienes lunas polarizadas y un carro nuevo, te estás poniendo en primer lugar en la lista de los que pueden ser asaltados", expresó el ministro.

En el mercado existen tres tipos de lunas polarizadas: de primer, segundo y tercer nivel.

Con las lunas de primer nivel se puede apreciar ligeramente el interior del vehículo desde afuera con bastante claridad; las de segundo nivel permiten ver solamente la silueta de quienes ocupan el vehículo; y con las lunas de tercer nivel el oscurecimiento es total y desde afuera no puede verse absolutamente nada.

Por su parte, César López, especialista en informática, posee también una camioneta 4x4, pero, a diferencia de Gustavo Dávila, nunca hizo uso de las lunas oscuras.

"Yo estoy de acuerdo con que se elimine el permiso. Las lunas polarizadas hacen que la Policía detenga constantemente a los conductores y creo que es una forma de facilitar el trabajo de los efectivos", expresó.

Probablemente, muchos usuarios estarán en desacuerdo con la medida. Otros opinarán lo contrario. El debate apenas se inicia.

La propuesta y su antecedente

No es la primera vez que existe en el país una iniciativa para limitar el uso de lunas polarizadas en autos particulares.

En el 2012, la congresista Gabriela Pérez del Solar presentó un proyecto de ley que prohibía el uso de lunas oscurecidas. La parlamentaria afirmó que la normativa buscaba reducir el nivel de inseguridad en las calles.

“Se otorgan permisos a cualquiera que cuente con los recursos económicos necesarios y existe un alto porcentaje de licencias falsificadas”, afirmó en aquella oportunidad Pérez del Solar.

Actualmente, tramitar el permiso cuesta 500 soles y su duración es de dos años. Los usuarios svalen de tramitadores que cobran 300 soles adicionales.