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POR: IVAN REYNA

De los 110 pozos subterráneos inventariados en el 2002 por la Administración Técnica del Distrito de Riego Mala-Omas, muchos han terminado secándose. Cada vez son más empresarios los nuevos dueños de terrenos agrícolas que tienen planes de levantar urbanizaciones en medio del valle. 

La pregunta es: ¿Cómo abastecerán de agua a sus residencias? ¿Pasará lo mismo que Los Platanales en Bujama donde APRILS terminó agotando la napa freática al llevarse el agua a las playas de Asia? Ya algunos de estos proyectos de condominios han empezado a perforar el subsuelo para succionar las pobres fuentes de agua subterránea. Y debido a tantas excavaciones indiscriminadas, es que muchos pozos históricos dejaron de tener agua o terminaron salinizándose, como esta foto que muestra al primer pozo –del fallecido Julián Arias- perforado en el sector de El Gallo en Esquina de Asia, donde se encontraría la bolsa de agua. Pero es en esta misma zona donde se encuentran los pozos comunales que pasan por crisis hídrica. 

Hasta el año pasado funcionaban independientemente los llamados pozos 2, 3 y 4 y con un apreciable chorro de agua. Hoy estos pozos tienen que juntarse en uno solo para socorrer con un poco de agua. 

El tema del agua es serio. La agricultura necesita una mirada real. Analizar las sequías, los cambios climáticos, las recargas acuíferas, las bolsas de agua. Igual sucede con el agua de consumo humano que se distribuye a las poblaciones de Asia provenientes de fuentes subterráneas. 

En lo que va de la campaña electoral, debería escucharse o leerse planteamientos puntuales, sostenibles, reales. Por suerte la población ya está convencida que Ñauñacu es una estafa debido a que ya fue inaugurado hace casi un año y hasta ahora ni una gota de agua. 

Era previsible. La ciencia no se equivoca. Ahora, he escuchado una propuesta de traer agua de la zona de Calango, sería bueno pensar en los conflictos sociales que eso traería. 

Otro candidato propone seguir perforando más pozos para abastecer de agua a la población cuando el subsuelo ya está en su fase agotamiento. Un recorrido por los pozos del valle sería bueno para entender la realidad. 

En los últimos días he escuchado a dos candidatos hablar de desalinizar agua de mar, un tema que lo he planteado desde hace unos diez años, y que en las elecciones pasadas sólo un candidato lo tomó como bandera. Ahora son dos candidatos -de lo que he escuchado, quizá hayan otros- que proponen como una de las tantas alternativas en estos tiempos de sequías, escasez, y valles secos –caso Tacna- que agotó sus fuentes de agua dulce y tuvo que acudir a la desalinización de agua de mar. No hay razones para esperar que eso suceda. Estamos a tiempo. Y la desalinización no es la única alternativa, hay otras como las zanjas de infiltración, reforestación, construcción de reservorios, levantamientos de presas, etc., etc. Bienvenidas las lluvias de ideas…