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Con la participación de más de 800 efectivos, la Policía Nacional ejecutó anoche y esta madrugada un sexto megaoperativo en el asentamiento humano Puerto Nuevo, una de las zonas más peligrosas del Callao y donde los agentes no ingresaban hace varios años.

Al mando del director general de la PNP, Jorge Flores Goicochea, y con la presencia del viceministro de Gestión Institucional del Ministerio del Interior, Roberto Reynoso Peñaherrera, y de diez fiscales del Callao, las fuerzas del orden ingresaron de manera sorpresiva al lugar,logrando detener a cuatro delincuentes y a 180 indocumentados.

De los cuatro capturados, dos están requeridos por la justicia por la comisión de diversos delitos. Una tercera persona fue sorprendida portando un arma de fuego sin licencia, y una cuarta fue intervenida por tener droga y una réplica de pistola, informó Flores Goicochea.

“Es la zona más peligrosa del Callao y, como ahora, estos megaoperativos van a continuar todas las semanasen diferentes días para tener mayor presencia policial, lograr la captura de delincuentes e incautar armas”, refirió.

Tras su ingreso a Puerto Nuevo, con patrulleros, camiones portatropas y una tanqueta, los efectivos de diferentes unidades intervinieron tres inmuebles de microcomercializadores de droga, donde se halló 243 ‘ketes’ de pasta básica de cocaína, 45 gramos de esta misma droga, 30 envoltorios de clorhidrato de cocaína, 21 pacos de marihuana y otras tres bolsas de esta misma sustancia.

La Policía Nacional también ejecutó otras acciones en simultáneo en Ate y Magdalena, logrando recuperar vehículos robados, decomisar droga y detener a malhechores.

En Ate, con la movilización de 135 efectivos, se logró recuperar dos vehículos robados en operativos de control de tránsito, se detuvo a cinco personas por los delitos de robo y venta de droga, y a otras cinco que eran buscadas por la justicia. También se decomisó 200 ‘ketes’ de pasta básica de cocaína y 10 ‘pacos’ de marihuana.

En tanto, en Magdalena se logró intervenir a dos delincuentes armados en momentos en que pretendían asaltar a dos ciudadanos norteamericanos que se movilizaban en su vehículo por la avenida Pershing rumbo al aeropuerto Jorge Chávez.

Los hampones, identificados como Carlos Monzón Sotomayor (25) y Bryan Alexander Dávila Bravo (26), ya habían roto la luna posterior del auto de sus víctimas, cuando fueron interceptados por los policías, produciéndose luego un intercambio de disparos. Finalmente, uno de los malhechores resultó herido y ambos fueron capturados.